A lo largo de toda mi vida siempre he sido una persona que priorizaba el movimiento al sedentarismo. Desde pequeñito me ha gustado mucho andar y descubrir sitios nuevos, fruto de una curiosidad enorme y constante. Siempre me he considerado una persona totalmente adicta a las aleatoriedades que ocurren en la vida, en el camino. Con el paso de los años y una vez abandonado el instituto, el tiempo que dedicamos a estar sentados ya sea estudiando o delante de un monitor… a mi parecer es alarmante. Si lo pensamos con consciencia a nivel evolutivo esto es una tortura física y mental. Entonces se nos viene a la cabeza una pregunta: ¿Cómo tener mejor salud?. ¿Qué puedo hacer para revertir esta tendencia a la inmovilidad?.
Nuestros antepasados, viviendo en base al nomadismo y a la caza, se movían y trabajaban sus músculos por el simple hecho de que a mayor masa muscular y sentidos agudizados, mayor posibilidad de supervivencia. La evolución nos ha traído hasta aquí pero nuestro cuerpo no ha evolucionado como para acostumbrarse a una vida sedentaria y pasiva. Hay que nutrir a la mente y también a nuestro cuerpo, no en vano es el que nos acompaña hasta el día que se apague la luz. Entender y tomar constancia de esto me hizo cambiar mis hábitos poco a poco y ganar autoconsciencia, cuidar mi alimentación y entrenar. Lo que en un primer momento es un esfuerzo (cualquier cambio de hábito lo es) la tendencia natural de mi personalidad acabó alineándose con sus verdaderos valores y encontrándose saludable ante una actitud positiva en cuanto al movimiento.
¿Cómo puedo empezar a cuidarme?
Cuando estaba empezando la carrera, gracias a un amigo descubrí a Marcos Vázquez, autor detrás del blog Fitness Revolucionario. Hace relativamente poco comentábamos este colega y yo que cuáles habían sido las personas que más nos han influido -e influyen- en nuestra vida. Y orgullosos tenemos claro que Marcos está en el primer puesto de la lista. Su blog es una herramienta esencial para empezar a entender y estudiar la salud. Increíble divulgador, Marcos explica de una manera clara y sencilla conceptos muy complejos del cómo funciona nuestro cuerpo. Acabaréis entendiendo que un correcto equilibrio entre alimentación, deporte y descanso es la formula perfecta para una vida saludable, tanto a nivel físico, como mental.
Si sois ávidos lectores os recomiendo encarecidamente sus cuatro libros que abarcan estos aspectos:
- Fitness revolucionario: lecciones ancestrales para una salud
- Saludablemente: hábitos para optimizar tu cerebro y mejorar tu salud a cualquier edad
- Invicto: logra más, sufre menos
- Vive Más: Reduce tu edad biológica y aumenta tu vitalidad
A título personal recomendaría encarecidamente su lectura ya que la cantidad de sabiduría sustentada en ciencia que hay aquí es apabullante. Es importante ser muy conscientes de nuestra finitud como personas humanas para tomar las riendas de nuestra propia salud. Quizás estemos inmiscuidos en el día a día teniendo hábitos tóxicos, tanto físicos como mentales, sin darnos cuenta. La lectura puede ser el mejor revulsivo para darnos cuenta de que las cosas no van bien.
Soy de la creencia de que todo en exceso es malo, me parece igual de crimen el pasarse todo el día en casa sin moverse, como no ser capaz de parar quieto y obsesionarse con el deporte. Como bien decía Aristóteles: «en el término medio está la virtud».
Quiero empezar a hacer deporte
Si me permitís un consejo para empezar a hacer deporte, yo os recomendaría que primero, si sois personas sedentarias, es que empecéis a desplazaros más con vuestras propias piernas. Mucha gente coge el coche para prácticamente todo. Me consta de verdaderos cabezotas que hasta que dejan el coche aparcado en la puerta del trabajo o de su destino, no cesan en su empeño. Quizás dejar el coche más lejos conscientemente es un buen punto de partida o sí, si os veis con ganas, prescindir del mismo si podéis, y empezar a ir andando a todos los sitios. ¿Ascensores? Podéis empezar a utilizar las escaleras. Pequeños cambios pueden suponer una enorme transformación a futuro.
No me pondría metas gigantescas nada más empezar porque posiblemente no las cumpláis, y os generará frustración. Conviene generar el hábito saludable poco a poco y sintiéndonos a gusto con vosotros mismos. Pero recordad siempre que va a haber incomodidad, que estáis saliendo de vuestra zona de confort. Tened presente la imagen mental que queréis tener de vosotros a futuro como meta para seguir mejorando, esto podrá ayudaros en los momento de flaqueza.
Si sois personas que ya soléis caminar con frecuencia, pequeños o más largos paseos en la montaña son un excelente antídoto contra el estrés y la ansiedad. Hay un término que conocí por Marcos, la biofilia, que explicaría esa sensación de bienestar que nos invade a los humanos cuando estamos en la naturaleza. Una vez más tiene sentido cuando hasta hace relativamente muy pocos siglos todavía vivíamos entre los árboles. Estamos acostumbrados al monte, y la naturaleza nos lo recompensa cuando vamos a visitarla.
Lo importante de todo esto y con lo que me gustaría que os quedarais es que tenemos un cuerpo que nos acompañará hasta el día que ya no estemos aquí. Todo lo que hacemos está en nuestra mano para mejorar nuestra edad biológica (muy diferente que la cronológica). Pensad en personas de vuestra edad que parecen mucho más jóvenes, con energía y vitalidad. En su defecto, también mucho más mayores. Tristemente hay muchas enfermedades que pueden aparecer en la vida humana por mucho que se cuide la salud, pero esto no es justificación para no darle a tu cuerpo cosas buenas y reducir las probabilidades de enfermedad y de tener la oportunidad de sentirnos bien.
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